Pida a su representante que DIGA NO A LA HR 9495 ¡AHORA!
Este proyecto de ley (anteriormente H.R. 6408/S. 4136) otorgaría al futuro presidente, Donald Trump, y a su Secretario del Tesoro, elegido por él, un poder único sin precedentes para investigar y revocar la exención fiscal de cualquier organización-incluidos medios de comunicación, universidades y grupos de libertades civiles- basándose en meras acusaciones de irregularidades.
¿Qué está en juego?
Poder sin control: El Secretario del Tesoro podría designar a organizaciones sin fines de lucro como “organizaciones de apoyo al terrorismo” por proporcionar un “apoyo material” vagamente definido a entidades extranjeras.
Sin garantías procesales: Las organizaciones afectadas sólo dispondrían de 90 días para “subsanar” la designación, pero ni siquiera se les explicaría qué han hecho mal si se considera un asunto de “seguridad nacional”.
Silenciar la disidencia: Sin pruebas ni explicaciones claras, las organizaciones sin fines de lucro podrían verse sorprendidas, incapaces de defenderse y cerradas de hecho.
Este proyecto de ley socavaría las libertades civiles, enfriaría la libertad de expresión y abriría la puerta a futuras administraciones para atacar a grupos progresistas, activistas estudiantiles y a cualquiera que defienda la justicia.
Se acaba el tiempo para impedir que este peligroso proyecto de ley se convierta en ley. Nuestra democracia se nutre de la capacidad de las organizaciones sin fines de lucro, los medios de comunicación y los grupos de defensa de los derechos humanos para exigir responsabilidades a quienes detentan el poder. La H.R. 9495 amenaza con destruir esos cimientos al otorgar una autoridad sin control para silenciar la disidencia y perseguir a las organizaciones que luchan por la justicia. Necesitamos su ayuda para garantizar que nuestras voces se mantengan fuertes y nuestras libertades intactas.
Dona hoy para apoyar nuestra lucha contra este ataque a las libertades civiles. Cada dólar nos ayuda a movilizar a las comunidades, defender la justicia y proteger los derechos de las organizaciones amenazadas. Juntos, podemos salvaguardar nuestra democracia y garantizar que ninguna administración pueda ejercer un poder tan peligroso.